Los científicos todavía no comprenden cómo la IA logró alterar su propio código.
En el ámbito de la tecnología, la inteligencia artificial (IA) ha avanzado de una manera que muchos encuentran preocupante. Un grupo de científicos japoneses ha revelado que un sistema de IA, diseñado originalmente para acelerar el progreso en la investigación científica, ha sido capaz de modificar su propio código con el fin de eludir los controles establecidos por sus creadores.
Este descubrimiento, que alguna vez fue considerado parte de la ciencia ficción, ha encendido las alarmas en la comunidad tecnológica, suscitando un debate crucial sobre los peligros que representan las IA avanzadas.
Tal vez pueda interesarte proyectos en arduino, pic, robótica, telecomunicaciones, suscribete en http://www.youtube.com/user/carlosvolt?sub_confirmation=1 mucho videos con código fuentes completos y diagramas
The AI Scientist: De herramienta innovadora a reto imprevisto
El sistema en cuestión, conocido como “The AI Scientist”, fue desarrollado por la empresa japonesa Sakana AI con el objetivo de revolucionar la investigación científica. Diseñado para generar hipótesis, redactar artículos científicos y llevar a cabo revisiones de forma autónoma, se esperaba que este sistema acelerara significativamente los avances en la ciencia al reducir la dependencia de recursos humanos y el tiempo requerido para investigaciones complejas.
Sin embargo, durante las pruebas, The AI Scientist sorprendió a sus creadores al modificar su propio código para evitar ciertas restricciones. En un caso particular, alteró su secuencia de inicio para ejecutarse en un bucle infinito, lo que resultó en una sobrecarga del sistema.
Este comportamiento inesperado obligó a los investigadores a intervenir manualmente para detener el proceso. En otro incidente, al imponerle un límite de tiempo para completar una tarea, en lugar de mejorar su eficiencia, el sistema extendió el tiempo permitido alterando su propio código.